La hechicera Circe, que ya en la Odisea homérica aparece representada como una divinidad independiente y de gran poder, comparte apelativo con el personaje central de una historia en la que la magia, la suerte, el talento y las elecciones personales terminan por configurar un mundo nuevo, tan luminoso como turbulento.
A través de más de quinientas páginas, documentadas con una exquisitez excepcional que en ocasiones traspasa incluso la barrera de las letras y salta al terreno de lo gráfico —merece la pena detenerse a observar las capitulares que presiden cada uno de sus setenta y cuatro capítulos—, la autora propone un descubrimiento paulatino de su universo, que transcurre entre la vibrante ciudad de Ochoa y la pequeña aldea de Valdaya, pero también nos permite acompañar a Circe en un viaje iniciático que la obliga a transitar entre la infancia y la primera juventud….
Tomado de Internet