Los increíbles jardines del Palacio de Versalles donde se puede apreciar el Gran Canal, un lago artificial muy grande donde navegaban naves de guerra con el objetivo de entretener a la realeza. Otra de sus atracciones es l’Orangerie, el lugar donde el rey tenía sus propios naranjos porque era el único que podía cultivar naranjas en París.
Los jardines cuentan con numerosos estanques, fuentes, árboles y flores estructurados de forma muy estética y artística. Son un ejemplo a seguir para cualquier diseñador de jardines de hoy en día. Entonces, para tu visita a París, no te puedes perder los jardines del Palacio de Versalles, y mucho menos, claro está, el palacio.