En su más reciente visita al país, tuve un encuentro con un icono de la belleza venezolana, Miriam Quintana, la primera y hasta la fecha la única en ostentar el título de Miss Venezuela “Encargada”.
Puntual, alta, elegante y bella, así es Miriam, quien gentilmente me hizo en espacio en su agenda, para nuestro encuentro. El cual se realizó en un reconocido restaurante de la urbanización Santa Fe, de La Gran Caracas, y duró exactamente una hora, como se había programado.
Miriam Sagrario Quintana Quintana, nació en Caracas, Distrito Capital el 9 de julio de 1963. Estudió en el Colegio María Auxiliadora, donde casualmente también lo hizo Irene Sáez, a quién conoció y tuvo trato, sin llegar a ser grandes amigas, por la diferencia de edad y años de estudios.
La prensa de la época la presentó así: Miriam Quintana es una fuerte candidata con un bello rostro, gran expresividad y facilidad de palabra. Estudia 5to año de Bachillerato en Ciencias, piensa estudiar Relaciones Publicas. Tiene 17 años de edad, es del signo Cáncer. Pelo castaño y ojos pardos. Su estatura es de 1,80 y sus medidas 90-60-92. Es aficionada al ballet. Como deporte practica el voleibol y basquetbol.

¿Cómo llegó Miriam Quintana, al Miss Venezuela 1981?
Mi participación se logró a través de la invitación que me hizo el propio Osmel Sousa, cuando me conoció en un desfile de moda que organizó Herman´s Institute.
Osmel, se acercó y se sentó en nuestra mesa donde estaba con mi mamá, me indicó que tenía sobradas condiciones para participar. A la semana siguiente se reunió con mis padres en nuestra residencia, para formalizar mi participación.
Recuerdo que el periódico “Últimas Noticias”, fue el primero en publicar mi foto en traje de baño como Miss Distrito Federal.
María Kallay fue mi profesora de pasarela y Manuel Carvajal fue mi estilista en el Miss Venezuela, también lo fue de Úrsula Remien, Miss Lara e Irama Muñoz, Miss Departamento Vargas. Por eso nos las llevamos muy bien las tres durante el desarrollo del certamen.
La presión más fuerte se hizo presente las semanas finales del certamen, debido a que la prensa publicaba fuertemente el nombre de Irene Sáez, Miss Miranda y el mío, como las máximas favoritas a ganar la corona. Según para ellos, Miss Venezuela 1981, debía ser Irene o Yo.
Ese suspenso fue fuerte, hasta que decidí no leer más la prensa, y seguir con calma mi participación.
¿Miriam que recuerdas de tu vestido de gala?
Mi traje de gala fue un diseño de Osmel Sousa, quien se inspiró en una lámpara que tenía en su oficina, con muchos flecos de hilos y pedrería. Tu vestido será así de muchos flecos y brillo, me dijo.
Elmar fue quien confeccionó el vestido. La verdad yo quería un traje de gala ajustado al cuerpo, porque consideraba que tenia buena figura y con ese diseño no resaltaría.
Recuerdo que en la prueba del vestido, Manuel Carvajal y Elmar decidieron que para crear impacto le iban a realizar una gran capa en organza rosado, que me cubriera el traje, y que en el desfile me la quitará lentamente mientras bajaba las escaleras del escenario.
¿Qué recuerdas de esa semana final, en Caraballeda?
En la semana final todas las misses y el equipo del Miss Venezuela, al igual que el canal Venevisión, prensa e invitados especiales nos hospedamos en el Hotel Macuto Sheraton, de La Guaira.
Mi compañera de habitación fue mi queridísima amiga Úrsula Remien, Miss Lara.
Esa semana todas las misses nos despertábamos tarde, pero a las 12 en punto por orden escrita de Ignacio Font, debíamos presentarnos maquilladas y peinadas en el restaurante para almorzar. De allí en adelante no había pausas, eran ensayos hasta la 1 de la madrugada con un “break” muy breve para la cena.
También en esos días finales se realizó la entrevista con el jurado y la presentación a la prensa.
Llegó el jueves 7 de mayo, día de la elección. Mi emoción, adrenalina y nervios estuvieron en su nivel más alto, di lo mejor de mí, pero no logré el triunfo, efectivamente ganó Irene Sáez, como siempre lo dijo la prensa. Pilin León se coronó como la primera finalista y yo me ubique como la Segunda Finalista del concurso.
Esa posición me permitió ser Miss Venezuela en el Miss Internacional.
¿Cómo fue tu preparación, para el certamen de Miss Internacional?
Tengo que confesar que para mi participación en el Miss Internacional, no recibí preparación por parte del Miss Venezuela. Es más, me enteré tres días antes, cuando era que iba a viajar a Japón. Por precaución yo, tenía en orden el pasaporte, visa y todo lo referente al viaje, solo me faltaba el itinerario del concurso.
Como mi viaje se hizo con retrasó, no me pude reunir con el grupo de las participantes latinas en Nueva York. Ellas si viajaron juntas hasta Japón, yo tuve que hacerlo sola.
¿Qué recuerdas de tu participación en el Miss Internacional?
Miss España, Francisca «Paquita» Ondiviela Otero fue mi compañera de habitación, nos la llevamos excelente.
Como traje típico utilicé el llanero de organza blanca y encajes negros, que desfilamos las misses en la presentación a la prensa. El traje de gala fue el mismo del Miss Venezuela.
Dos días antes de la final del Miss Internacional, se realizó un desfile en ropa deportiva de una marca aliada al concurso, donde debíamos desfilar, correr y brincar, sufrí una lesión en mi tobillo derecho, por lo que tuve que desfilar el día de la elección con una venda, que disimule con maquillaje.
Ese año ganó Miss Australia – Jenny Derek, una chica muy linda. Yo logré clasificar entre las 15 semifinalistas.
Regrese al país, y retomé mi cotidianidad, me ofrecieron incursionar en el modelaje y trabajos publicitarios, que fui aceptando.
¿Miriam que sentiste al saber que de las tres más bellas mujeres del Miss Venezuela 1981, fuiste tú, la única que no pudo coronarse internacionalmente?
La verdad eso no me afecto en lo absoluto, me sentí feliz por el triunfo de Irene Sáez como Miss Universo y Pilin León en el Miss Mundo. Como ambas fueron mis compañeras era como mi triunfo también.
Nunca tuve ningún tipo de complejo ante ellas. Si no logré triunfar en Japón, fue porque el jurado considero que no era el perfil de reina que buscaban.
Sin embargo siempre me he sentido orgullosa de mi participación y de haber representado con mucho honor y orgullo a Venezuela.
¿Cómo se enteró Miriam Quintana, que era la nueva Miss Venezuela 1981?
Después del triunfo de Pilin León como Miss Mundo, fue Manuel Carvajal quien me llamó y me informó como Irene Sáez es Miss Universo y ahora Pilin Miss Mundo. Miriam tú eres la nueva Miss Venezuela.
Recuerdo que mi amiga Maye Brandt, emocionada me prestó su banda de Miss Venezuela para que asistiera a mi primer compromiso. Fue el recibimiento de Pilin León a Venezuela, donde me presente como Miss Venezuela “Encargada”, como decían la prensa.
Días después en un acto sencillo Osmel Sousa, Presidente del Miss Venezuela, me impuso la banda y corona. Ese fue el mejor regalo de navidad, que recibí ese año.
¿Miriam cuales fueron tus funciones como Miss Venezuela Encargada 1981?
Mi primera actividad fue de la mano con la Gobernación del Distrito Federal en aquel entonces. Se trato del “Operativo Navidad”, que incluyó entrega de cesta de comida, ropa y juguetes, en los sectores populares de Caracas. También hicimos innumerables obras sociales en hospitales, orfanatos y escuelas.
La Policía Metropolitana, me invistió con el cargo de Agente Especial.
En 1982, asistí en calidad de jurado e invitada especial en los diferentes concursos regionales coronando a las misses ganadoras rumbo a participar en el Miss Venezuela de ese año.
Me invitaron a las Ferias del Sol, en el estado Mérida, donde tuve una hermosa participación.
Después que termino tu reinado como Miss Venezuela Encargada, la noche del 6 de mayo de 1982, ¿Qué pasó en tu vida?
Acepté ofertas de trabajo como modelo, pertenecí a Rita’s International Model Agency – Institute, en Caracas. Donde desarrolle destacada carrera como modelo a nivel nacional e internacional.
Comencé estudios de derecho, me gradué como abogado.
En 1990, decidí hacer vida en Paris, Francia
En la actualidad, estoy retirada de las pasarelas, la publicidad, y todo medio ligado a este ambiente artístico.
Estoy residenciada en Dubai, Emiratos Árabes Unidos, donde trabajo y disfruto de cada momento hermoso de la vida.

Así, concluyó mi entrevista con la elegante Miriam Quintana, la niña soñadora que en el año 1981, termino cumpliendo con los compromisos del reinado de Miss Venezuela.
Por: Tony Hidalgo
Sígueme en Instagram @tonihidalgoa