Guerrero victorioso y cruzado, Rey de Aragón, Valencia y Mallorca, un Rey clave en la reconquista española quien ganó vastas extensiones de tierra ganándose por ello el título de “Conquistador”.
Nacido en Montpellier, hoy territorio francés, el 2 de febrero de 1208 fué hijo de Pedro II el Católico, rey de Aragón y de María de Montpellier, tenía apenas seis años cuando su padre murió en la batalla de Muret, contra los albigenses (1213). Entonces, Jaime fue capturado siendo un niño, y quedó prisionero de Simón de Monfort, líder de la heregía cátara.
Gracias a la intervención ante el Papa Inocencio III sería liberado de los cátaros y pasaría a la tutela de los Caballeros Templarios quienes instruyeron al muchacho para ser Rey.
Jaime I fue, por sobre todas las cosas, un guerrero, de ahí su apodo de “Conquistador”, pero además de ello fue un noble, y un cruzado y, por consiguiente, según la época un hombre de Dios..
Casado en primeras nupcias con Leonor de Castilla y en segundas con la princesa Violante, hija del rey de Hungría . Sus últimos años se vieron ensombrecidos por varios factores, la principal, el alzamiento que encabezó su hijo Pedro y las turbulencias su hijo bastardo Fernando Sanchís de Castro, promovió entre los feudales del reino.
Don Jaime I el Conquistador falleció e Valencia, el 27 de julio de 1276, a los sesenta y ocho años de edad, poco después de dictar el testamento en el que dividió su extenso reino entre sus hijos Pedro III (Aragón, Cataluña y Valencia) y Jaime II (islas Baleares, el Rosellón y Montpellier).
Los restos del monarca reposan el panteón real del monasterio de Poblet, en Tarragona, un monumento del siglo XII. Fue Pedro III el Ceremonioso quien decidió que los soberanos de la Corona de Aragón pasarían a la eternidad en este claustro y mandó construir un panteón real a cada uno de los lados del altar mayor. En el lado izquierdo reposa Jaime I y su esposa Violante.
Reconocido como uno de los más grandes reyes españoles, valeroso cruzado y prudente legislador, equiparable en grandeza a Luis de Francia o Fernando III el Santo de Castilla y León.
Uno de los grandes reyes que ha tenido España.
